SPUTNIK 50, y I

Hoy traigo una primicia para Sukarra. El jueves pasado asistí en CosmoCaixa, junto con otro sukarrero, a una conferencia que impartía AlexeiLeonov acerca del 50 aniversario del lanzamiento del Sputnik. La carrera espacial es un tema que sin duda me apasiona, así que podéis imaginar lo que disfruté durante las más de 2 horas que duro el acto. Intentaré narrar aquí la mayor parte de las cosas que explicó, completando las lagunas que hubieran con información sacada de la red.

Leonov, de 71 años, enfundado en un traje a rayas, comenzó su discurso al más puro estilo soviético. Frases cortas, con pausas y acompañándolas con gestos simétricos de sus brazos. Comenzó digo, alabando CosmoCaixa y dijo que no conocía en el mundo un sitio que mejor contribuyera a la divulgación científica entre los niños. Es cierto, si tenéis o habéis tenido la oportunidad de visitarlo podréis ver que está muy enfocado al público infantil, y que estos disfrutan como niños ( nunca mejor dicho ) en los diferentes experimentos que llenan el museo. Volviendo a Leonov, comenzó explicando el origen de la carrera espacial. Al final de la II Guerra Mundial, rusos y americanos corrieron a capturar la tecnología de las famosas V-2 que habían atemorizado a los habitantes de Londres. Estos misiles de largo alcance, eran lanzados desde Alemania, tras una primera propulsión, al agotar el combustible se precipitaban sobre el objetivo en caída libre a 4 veces la velocidad del sonido. Imaginaos el terror que provocaban, pues sólo se oía el silbido de su vuelo tras haber caído. El padre de la V-2, la V-1 era una especie de avión teledirigido que portaba carga explosiva. Este modelo era fácilmente abatido por los cazas de la RAF que con un simple golpe de ala los desviaban de su trayectoria. Así pues, rusos y americanos, fueron en busca de WernherVonBraun, padre de las V-2 y rapiñaron todo lo que pudieron de la fábrica de las mismas. Contaba Leonov, que cuando los rusos entraron en la casa de VonBraun, encontraron un café con leche todavía caliente sobre la mesa. No hacía ni 10 minutos que los americanos se habían adelantado a los rusos en la fabricación de misiles intercontinentales. Tenían al cerebro alemán y las partes más importantes de la fábrica de cohetes de Peenemünde, en el Báltico alemán. La carrera espacial, pues comenzaba con un adelanto de los americanos. VonBraun, años más tarde, coincidió con Leonov y le explicó que el comenzó a trabajar en cohetes para viajar al espacio, y que el partido nazi le obligó a adaptar su tecnología en la fabricación de armamento. Seguía años después sintiéndose culpable de las atrocidades cometidas por su V-2, y el viajar a América para integrarse en el programa armamentístico americano no fue más que una segunda parte de la pesadilla que estaba viviendo. VonBraun dijo que en la fabricación de las V-2, había un conchabamiento entre los ingenieros para sabotear selectivamente el sistema hidráulico de los cohetes y así consiguieron que un buen número de bombas no llegaran a su destino. Aún así cayeron casi 1000 en toda Europa, de las cuales unas 600 fueron a parar a Londres. Afortunadamente, la tozudez de un ingeniero ruso, SergeiKorolev, que se empeñó en redirigir el programa armamentístico soviético hacia el espacio, hizo que los americanos tuvieran que quitar a VonBraun del programa armamentístico y ponerlo a trabajar en su programa espacial. En esta parte, me dejo una perla que no llegué a entender del diálogo que sostuvieron VonBraun y Leonov.

Bueno sukarreros, os dejo aquí la primera entrega, ya seguiremos. Espero que os haya entretenido.