martes, 26 de febrero de 2013

Si no firmas...

Un corto sobre los despidos, las indemnizaciones, los finiquitos y todos estos temas que se están poniendo fatídicamente de moda.

viernes, 22 de febrero de 2013

tELESCOPIO dE vIAJE

Hola sukarrats, 

el viernes pasado nos visitó el famoso asteroide 2012DA14 del cual habréis oído hablar ampliamente estos días. No era una oportunidad para perderse, pues calculé que durante su máxima aproximación a las 20:30 sería visible con mis LidlPrismáticos 10x50 de 20€ y que a partir de las 22:00 sería necesario un pequeño telescopio para verlo pues ya pasaría a magnitud 10. La cosas no iban a ser fáciles, pues ese día tenía pensado subir a Puigcerdà por la tarde para esquiar el fin de semana, así que había que buscar alguna forma sencilla de poder verlo sin tener que llevarme mi pesado y voluminoso telescopio.

Así pues, empecé a rebuscar entre los artefactos astronómicos que he ido acumulando estos años y pensé que podría utilizar varias piezas para fabricarme un telescopio ligero y portátil. Los elemento empleados fueron:

- Buscador Lumicon de 80mm f/3.7, un buscador un poco grande para su cometido y muy luminoso, que adquirí de segunda mano. Su única pega es el enfocador helicoidal (hay que enroscar y desenroscar) que lo hace poco práctico para ir cambiando oculares. Así que pensé que podría acoplarle un único ocular. Para ello elegí 
- Ocular Televue Panoptic de 24mm, el ocular que más amplitud de campo me da de los que tengo.
- Como vi que para poder hacer foco tenía que apartar el ocular unos 5 cm del enfocador del buscador, pensé que poner una diagonal de espejo ayudaría a alargar el tubo, al tiempo que proporcionaría un ángulo de visión más cómodo. Aproveché un prisma barato del primer LidlScopio que tuve.
- Necesitaba un trípode y como el conjunto era ligero, utilicé un Manfrotto que tengo para la cámara de fotos.
- Y como el conjunto necesitaba algo de altura y mayor capacidad de rotación que con la rótula de serie del trípode, pensé en acoplar el cabezal de un monopodo que compré hace tiempo también de segunda mano. Manfrotto también, es muy sólido y fácil de bloquear/desbloquear, pues funciona como el joystick de mi antiguo Spectrum. (cuantos invasores del espacio exterior cayeron bajo este yugo).

El conjunto, como podéis ver queda muy compacto y ligero y fácilmente transportable en una mano cuando encoges las patas del trípode.

Aquí podéis ver el montaje completo, y a la derecha lo que se veía por el ocular, que se corresponde con el área enmarcada en un círculo rojo. Los ciclistas de Badalona lo habréis reconocido pues es la subida de la torre eléctrica que lleva a la hermita de San Esteban... muy difícil de subir de un tirón. Como podréis observar la imagen no es de gran calidad, a la altura de los componentes. Pero la prueba de fuego tenía que hacerse con el velo de la noche encima.

Al final, por problemas logísticos, llegamos tarde a Puigcerdà y dejamos pasar esta oportunidad histórica :( ... pero la siguiente noche era una buena ocasión para poner a prueba este invento. Así que salimos en espedición con Coco y tras deambular un poco por el pueblo, encontramos un lugar en pendiente en la parte alta del pueblo en el que no había mucha contaminación lumínica, al tiempo que los árboles no impedían ver el horizonte. La noche era magnífica y os diré que a simple vista era fácil de localizar algunos de los objetos messier más destacados. Nos recreamos en varios cúmulos abiertos de CanisMajor y Auriga, con Júpiter y con la Galaxia de Andrómeda. En conjunto la impresión fue muy buena, pero la prueba no superó una aberración cromática espectacular apreciable en Júpiter (fui capaz de ver halos verdes, púrpuras, amarillos y violetas... creo que batí record) y una reflexión interna de caballo al intentar ver objetos próximos a Júpiter y a Sirio. Esto último sin duda culpa del brillante acabado del aluminio anodizado del interior del buscador.

Ventajas:

1. Portabilidad y transporte. Se puede llevar en una mano, y todo plegado te cabe de sobras en una bolsa de viaje o maleta y aún sobra espacio.
2. Facilidad de uso. Es increíble lo fácil que era localizar los objetos, gracias a
3. un gran campo de 4º de visión, que permitió ver en un mismo campo los bonitos cúmulos abiertos M36 y M38 de Auriga. La ampliación es de 12.3 algo superior a un prismático convencional tanto en campo como en ampliación.
4. La visión, gracias al espejo sólo mostraba inversión izq/derecha, manteníéndose la parte de arriba y abajo en su sitio.
5. La solidez del conjunto. El monopodo es muy sólido, y el bloqueo del mismo hacía que el campo de visión no se moviera a penas gracias a que el tubo es muy ligero.

Posibles Mejoras:

1. Baflear el interior del tubo para evitar las reflexiones internas.
2. Cambiar la diagonal de espejo por el prisma Takahashi que tengo, esto debe mejorar la calidad de la imagen.
3. Cambiar el enfocador helicoidal, toda una tortura de uso, que casi obliga a mantener un único ocular en toda la sesión por lo poco práctico de reenfocar cada vez que se cambia el ocular. Para que os hagáis una idea, con helicoidal se viene a decir que hay que enroscar y desenroscar para que el portaocular entre o salga del tubo. Este cambio hay que hacerlo bien, pues un enfocador más aparatoso puede elevar el peso del conjunto lo cual sería contraproducente a la hora de bloquear el monopodo y que no haya flexión.

Si alguien se anima, ya sabe, le puede salir un telescopio de viaje muy baratico.

martes, 19 de febrero de 2013

tHE mISSING sUPERNOVA

A raíz de un intercambio de correos con la comunidad científica quiero recopilar aquí información sobre las supernovas que ha habido en nuestra galaxia. El interés parte del hecho que según la observación de supernovas en galaxias similares a la VíaLáctea, se producen del orden de 3 cada centuria... la última supernova observada en nuestra galaxia data de 1604 en la constelación de Ophiucus (os suena? es el nuevo signo del zodíaco) y fue estudiada por JohannesKepler. Anteriormente, en 1572, su colega TychoBrahe había estudiado lo que fue la primera supernova de los tiempos modernos, localizada en la constelación de Cassiopeia y cuyo brillo sólo era superado por el de la Luna. Anteriormente, la única supernova de la que queda registro es del 1054, en la constelación de Taurus. El remanente forma la conocida Nebulosa del Cangrejo y tiene el honor de ser el primer objeto del catálogo de CharlesMessier. La foto que encabeza el post es una instantánea que tomaron los indios Anasazi en la época.



Estas supernovas se caracterizaron porque su brillo fue tan intenso que durante 4 días podían verse incluso de día y su brillo fue observable a simple vista de noche durante unos 4 años, para luego apagarse y desaparecer de los cielos. Actualmente son visibles con telescopios de aficionados. De estos objetos el más bonito y que he tenido la oportunidad de observar es la Nebulosa del Velo en Cygnus, que corresponde a una supernova que tuvo lugar hace unos 36,000 años cuando el hombre aún habitaba las cavernas.




El misterio viene pues, que desde 1604 no ha vuelto a verse ninguna otra supernova en nuestra galaxia... dónde están? Cuándo será la siguiente? Estudios de Nebulosas planetarias indican que posteriormente sí se han producido supernovas pero que se desconoce por qué nadie las vio o las registró en su día. En la siguiente lista podéis ver que en 1670 aproximadamente hubo otra supernova en Cassiopeia de la cual no quedó registro. En el siguiente enlace de la NASA podéis ver, como con modernos telescopios se ha localizado una supernova incluso posterior, cuyo brillo fue oculto por el polvo intelestelar del plano de la Galaxia.

http://science.nasa.gov/science-news/science-at-nasa/2008/14may_galactichunt/

Así que ya sabéis, atentos a los cielos, sobre todo a Betelgeuse en Orión, que es una candidata a explotar en los próximos miles de años. Si sois testigos espero que pongáis esta cara al verla


PD: La foto de la Nebulosa del Velo y de la Nebulosa del Cangrejo que acompañan el artículo son de un amigo, al cual no he pedido permiso para publicarlas, claro.